
Como todo infinitivo éste está hecho de la infinidad de la esencia que el propio verbo Amar contiene surgiendo así la eternidad de éste, es x ello que Amar es infinito x SER infinitivo en todas sus formas no personales siendo así que, cada vez que amamos somos eternos.
Para participar de la infinidad del Amar lo hacemos siendo partícipes, de aquí que seamos un participio desde el cual somos amado/s, sin embargo como todo buen amado devolvemos lo recibido amando, perpetuando así el ciclo perfecto del AMAR , es por ello que todo final o fin contiene un nuevo inicio devolviéndonos así a nuestra capacidad interna e infinita como es AMAR.
Se pueden vislumbrar detrás de este maravilloso proceso pedagógico del Amar como a través de este juego, existe una gran sabiduría así como unas poderosas manos obrando en todo momento . Ponerle un nombre seria conceptuarlo y honestamente, basta con SENTIR como el infinito a través del infinitivo verbo del Amar obra, haciéndonos un participio de él amado/s amando devolviendo así lo recibido .
Es importante observar como más allá de la personalidad existen formas no personales las cuales nos siguen invitando al juego pedagógico del AMAR y del SER, basta con hacer una simple prueba empírica experiencial tal y como cambiar la forma verbal del Amar al SER y podrás comprobar esto que aquí se afirma.
El AMOR eterno e infinito se hizo infinitivo a través del verbo (SER), después a través del participio (SIDO ) haciéndose partes, para finalmente volver así mismo ( SIENDO ) gerundio a través de las formas no personales abundantemente rico en las experiencias del amar sabedor de que toda experiencia siempre genera riqueza.
“ QUE EL AMOR QUE NOS HA TRAIDO A ESTE PLANETA SIGA SIENDO NUESTRO GUIA EN EL “
